Estamos viviendo un fenómeno creciente de regulaciones en la región, que promueven la responsabilidad de las empresas en la creación de programas de integridad o modelos de prevención, que fortalezcan una cultura de prevención de delitos y malas prácticas al interior de las compañías.
En esta tarea existe un rol clave y complejo de los Directorios, que se desenvuelven es un ambiente de globalización creciente del mundo de los negocios, de fuerte empoderamiento de los consumidores, unidos por el uso de las redes sociales, y de gran fragilidad del valor de las marcas.
En este cuarto foro, profundizaremos con nuestros speakers en el análisis acerca de la exposición de las compañías a riesgos asociados a la corrupción en el contexto global; daremos una mirada en torno a la problemática y riesgos asociadas a la normativa sobre libre competencia; revisaremos un diagnóstico de la legislación nacional sobre responsabilidad penal de las personas jurídicas, el modelo de prevención que promueve y los cambios legislativos que se vislumbran para darle efectividad.
Finalmente, abordaremos los lineamientos o estándares globales a gestionar para construir esta cultura ética organizacional basada en valores, resaltando el rol de los directores en que esto efectivamente suceda.